Ya basta de tanto quejarse!!

Es sabido entre los escaladores que nuestro segundo deporte es llorar: que si no estoy fuerte por esto o aquello, etc. Sobretodo cuando nos lesionamos, que parece que se nos caiga el mundo encima. Que es exactamente lo que me pasó cuando me dijeron que tenía la pierna rota en Chamonix y me iba a Banff una semana y media después.

Pero bueno, después de dos años de altibajos, con tres operaciones, la caída de una piedra en la cabeza y otra en la rodilla en una misma vía y la rotura de una pierna por una caída, al final acabas arañando esas pequeñas cosas positivas que vas encontrando.

Cuando el médico me dijo que en tres semanas podría escalar y que si me dolía era normal y no había problema, me cambió la cara, ya que de las tres semanas en Canadá podría escalar como mínimo dos!!

Cuando llegamos a Banff no lo veía muy claro. Pero a la que vi que podía subir y bajar escaleras sin problemas, la cosa cambió. ¡¡¡Basta de tanto llorar y a escalar!!!

El lunes 18 de febrero fue el día y nos fuimos al Haffner Creek, un sector mixto a 20' del coche donde por fin pude escalar.

Genciana calentando en un de las cascadas de Haffner

No escalé muchas vías, igual cuatro, pero suficientes para sacarme el monillo y ver que la pierna me dejaría hacer algo por estas tierras heladas.

En Green Hanger M8 (Haffner)

Genciana en Half a Gronk M6 (Haffner)

Al día siguiente escalamos en Bear Spirit, otro sector de escalada mixta, aunque esta vez a 1 hora del coche.

Carlos Buhler en Dumerac M8 (Bear Spirit)

La pierna molestaba, pero como sabemos, sarna con gusto no pica.

También escalamos en Marble canyon, esta vez con una corta aproximación de 10' y un rapel de 45m para introducirte en este magnífico y estrecho cañón. 

En uno de los puentes que van cruzando el cañón

Marble es un pequeño sector que bien merece una visita.

Genciana en Tokkum Pole 

En Fantasy Shower M7+

Visto los resultados de la pierna decidimos, después de un día de descanso, ir hacia Icefields Parkway. Una zona a unas dos horas en coche de Banff donde podemos encontrar vías como Weeping Wall, Polar Circus y otras buenas y largas.

El Weeping Wall, con el Weeping Pillar en el muro superior

Nuestra primera intención era subir al Weeping Pillar, pero una mala noche y molestias en la pierna nos hicieron cambiar de opinión y fuimos a Polar Circus, vía más larga pero bastante más asequible y rápida.

Genciana empezando Polar Circus

Genciana como cabeza de cordada. Después de escalar el primer resalte me dijo "Oye, ¡¡voy a escalar de primera hasta los últimos largos!!¿te parece bien?", la verdad que no me dejó alternativa y tube que contestar con un tímido "¡Si!". Así que, sin pensárselo dos veces empezó a ensamblar sin muchos miramientos.

Genciana en otro de los muros de Polar Circus

Un par de horas más tarde y 500m más arriba llegamos a los últimos largos, donde comemos el bocata y cambiamos la cabeza de cordada.

Llegando a los muros superiores de Polar Circus

Empiezo a escalar el primer resalte de unos 30m.

Cuando llevo unos 15m escalados y con un tornillo 7m por debajo de mis piés, caen unas purgas de nieve polvo, cosa que me extraña basante porque no es la zona habitual de purgas. Segundos después se oye un fuerte crujido en la montaña, la verdad que no entiendo de donde viene hasta que miro hacia arriba y para mi sorpresa veo como se ha desprendido una gigantesca cornisa 200m más arriba y cae hacia mí.

Momentos antes del susto

Mientras va cayendo la cornisa me da tiempo a plantearme las diferentes opciones que tengo: saltar, intentar salir lo más rápido posible, esperar...

Curioso cráter que dejó la cornisa al lado de la cascada

Después de pensarlo fríamente la mejor opción es aguantar cogido de los piolos y esperar que la suerte este de mi lado.

En un primer impacto con la pared, la enorme cornisa se rompe en cachos y se extiende como un abanico que milagrosamente no me toca ni a mí ni a Genciana.

Otro de los "pequeños cachos" en que se rompió la cornisa

Acto seguido empieza una purga interminable donde me da tiempo de poner un tornillo y decirle a Genciana que me descuelgue para sacarme de esa agonia.

Parte superior de Polar Circus con la cresta dede donde cayó la cornisa

Como suele pasar, después de la tormenta viene la calma, aunque por si vuelve a tronar decidimos recuperar los tornillos y bajar al coche.

El "trocito" de cornisa que se desprendió

Al día siguiente decidimos volver al Haffner, donde escalar unos drys sin tenernos que preocupar de lo que tenemos por encima de nosotros.

Más fotillos:

Carlos Bulher en Green Hanger M8 (Haffner)

En la misma vía 

Genciana en Half a Gronk M6 (Haffner)

Saliendo de Marble Canyon por Tokkum Pole

Genciana en otro de los muros de Polar Circus

Al lado de The Pencil "en no muy buenas condiciones", je, je

Apa, bones escalades a tothom!!!